martes, 1 de julio de 2014

El nacimiento del cine sueco

El cine nace en Suecia oficialmente en 1907, de la mano de Charles Magnusson y de la sociedad que el mismo crearía, la A.B. Svenska Biografteatern. Todo y esto, ya contamos con precedentes, como el pequeño documental de 1905 titulado  Konung Haakons mottagning i Kristina (Recepción del rei Haakons y Kristina) que le propio Magnusson dirigiría o, anteriormente, el rodaje de las primeras películas como motivo de la exposición de Arte e Industria de Estocolmo de 1897. Entre los directores que destacaron antes del nacimiento de la Svenska, encontramos Robert Olsson, el cual dirigiría junto a Muck Linden en 1910, el primer gran éxito de la compañía,  Emigrant (El emigrante).


La primera producción sueca de la que Magnusson fue partícipe tras la creación de la A.B, Svenska Biografteatern se tituló Krigsbilder fran Bohuslän, una pequeña película de 16 minutos que muestra, tal y como su propio titulo indica, las imágenes de la guerra de Bohuslän. Pero sería la llegada de Victor Sjöström y Mauritz Stiller, lo que provocaría el apogeo del cine sueco en aquellos primeros años del siglo XX. El debut de estos dos hombres procedentes del teatro, se realizó de la mano de la A.B. Svenska Biografteatern en 1912, en un film titulado De svarta maskerna (Las máscaras negras) dirigido por Stiller y protagonizado por Sjöström y Lily Bech (pareja en aquellos días de Magnusson, pero que el siguiente año sería de Sjöstrom).  Bech, ya era conocida dentro del mundo del cine danés, por una producción con relativo éxito, titulada Morfinisten, un film de 1911 dirigido por Lous von Kohl, y que la llevó a participar en varias películas antes de debutar con Sjöström y Stiller en el cine sueco. Este trío formado por Sjöström, Stiller y Bech, realizaron conjuntamente otras películas durante aquellos primeros años de la segunda década del siglo pasado, como Barnet, en 1913 o Vampyrem, en 1913. A ellos se puede unir un segundo actor que participaría en numerosas películas, este fue Lars Hanson.
La influencia del cine danés estará presente en el cine sueco hasta estos primeros años de la década de 1910, años a partir de los cuales, el cine sueco adquiere una temática mas nacional. También con la contratación de Sjöstrom y Stiller por parte de la Svenska, se consigue un aumento de actores suecos, y es que, estos dos profesionales, formarían a nuevos actores como Karin Molander, Gösta Ekman, el ya nombrado, Lars Hanson o Richard Lund.

La labor de Sjöström y Stiller como directos, aportó dos importantes títulos en la todavía corta historia del cine sueco, como serian Ingeborg holm (1913) de Sjöström y Gösta Berling Saga (1923) de Stiller. La obra de Sjöström es descrita por el profesor Erik Helding, como una película que se anticipa al que hoy en día conocemos como realismo cinematográfico, además de experimentar a través de juegos de profundidad. Por su parte, en la obra de Stiller marcará el fin de la época dorada del cine mudo sueco, donde se podrán apreciar escenas de gran sofisticacón. También, como interesante curiosidad, será esta obra de Stiller la primera y única obra, donde aperece, como una actriz importante, la actriz Greta Garbo. Dentro de este periodo también encontramos otras grandes obras de ambos directores como kökarlen (Carreta fantasma) o Berg-ejiving och hans hustru (Los proscritos) de Sjöström.
También de esta época, concretamente de 1916, es la obra de Stiller titulada Vingarme, considerada por muchos como la primera obra de temática gay. Basada en la novela de Herman Bang, la obra nos relata la historia de un escultor y su atracción por su joven aprendiz.

Gran mérito de este época dorada se la debe el cine sueco a la literatura, y es que, son muchas las obras fílmicas que tienen su origen en obras literarias, como kökarlen (Carreta fantasma) o Herr arnes pengar (El tesoro de Arne) de la nobel sueca Selma Lagerlöf y dirijidas por Sjöstrom y Stiller respectivamente . También de Sjöstrom son Ingeborg Holm, film basado en la obra teatral de Nils Krook; Terje Vigen inspirada en el poema épico de 1882 de Ibsen o Berg-ejiving och hans hustru obra del islandés Johan Sigurjonsson y que inspiró la obra de Los proscritos.

Un elemento que otorga cierta particularidad al cine sueco durante este periodo, fue la utilización de la naturaleza en los decorados, no solo como elemento pasivo, sino como un elemento activo en la trama del film. El ejemplo de Berg-ejiving och hans hustru (Los proscritos), donde una tormenta de nieve termina con la vida de los protagonistas, causo una gran sensación en muchos espectadores franceses. También encontramos en una obra de 1916 del propio Sjöstrom, estamos hablando de Dödskyssen, elementos como el flash-back versionado por los diferentes personajes, un elemento que ya en Citizen kane (Ciudadano Kane), de 1941, nos parece tan innovador.
La utilización de la naturaleza como un personaje mas de la obra cinematográfica, procederá de la influencia de los films de Triangle, los cuales, acaban de llegar a Europa. El cine sueco, a diferencia de los westers de la compañia Triangle Picture Corporation, utilizan la naturaleza, no como un elemento pasivo y de forma (muchas veces) inconsciente, sino, como hemos visto en el caso de Berg-ejiving och hans hustru, su presencia será de vital importancia.

Pero si el campo de la dirección fueron importantes estas dos figuras, en el terreno de la interpretación no hay que olvidar importantes figuras que brillaron con luz propia. Ya hemos hablado anteriormente de Lily Bech y Lars Harson, pero no hemos de olvidar otras importantes figuras, como Ivan Hedqvist, J.W. Brunius o Gustav Molander.
El cine sueco brillaba con tal esplendor a comienzos de la década de los veinte, que atrajo a dos de los mas grandes realizadores daneses, Benjamin Christensen y Carl Dreyer. El primero de estos realizadores realizó en Estocolmo en 1922 su obra mas importante y también la mas controvertida, Häxan (la brujeria a través de los tiempos).

Durante gran parte de la década de los diez y los cinco primeros años de la década de los veinte, el cine Sueco había creado granes obras de la mano de Victor Sjöström y Maurirz Stiller; actores como Lily Bech y Lars Hanson; futuras promesas como Greta Lovisa Gustavsson ( Greta Garbo) o el productor, guionista y impulsor del cine sueco Charles Magnusson. Pero a partir de 1923, una gran parte de estos personajes viajará a Hollywood, la mayoría de ellos con poca suerte. Sjöstrom parte a los EEUU en 1923 para ser contratado por la Metro. Stiller, junto a Greta Garbo, viajan también a los EEUU para ser contratados por la misma compañía que su compatriota en 1925. Hanson, también prueba suerte, dejando Suecia en 1925 y trabajando para Sjöstrom en The Scarlet letter (La mujer marcada) en 1926. Incluso los nuevos venidos, como Christensen y Dreyer, abandonan Suecia a los pocos años de su llegada. Pero como hemos dicho, serán muchos los que retornan: Sjöstrom, retorna a Suecia en 1928, abandonando a su vez la profesión de actor y dedicándose exclusivamente a la actuación. Stiller, tan solo pudo finalizar, entre escándalos con compañeros de profesión, dos películas, regresando finalmente a su tierra natal en 1928 y muriendo un año después. El actor Lars Hanson, regresó a finales de la década de los veinte después de no poder competir con otros actores norteamericanos, debido a su intenso acento sueco. Tan solo, Greta Garbo triunfo y se quedó en tierras americanas.

Este éxodo hacia américa y la posterior decadencia del cine sueco se produjo en gran medida por el giro que Magnusson  le dio a su compañia A.B. Svenska Biografteatern. Los temas nacionales que tan buena crítica cultivaron, no fueron respondida con unas aportaciones comerciales.  Hollywood, Alemania y Francia, poseían un público mucho mas amplio que el estado nórdico, y todo y que las películas realizadas por Sjöstrom y Still poseían una gran calidad, no podían competir con el cine norteamericano y europeo. 

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